Wednesday, December 12, 2007

Modos


Otro interesante párrafo del libro " Cómo hacer amigos e influir en ellos", que me parece importante leer:



Digamos a un niño, a un esposo o a un empleado, que es estúpido o tonto en ciertas cosas, que no tiene dotes para hacerlas, que las hace mal, y habremos destruido todo incentivo para que trata de mejorar. Pero si empleamos la técnica opuesta: si somos liberales en la forma de alentar; si hacemos que las cosas parezcan fáciles de hacer; si damos a entender a la otra persona que tenemos fe en su capacidad para hacerlas, la veremos practicar hasta que asome la madrugada, a fin de superarse.


¿ Resibieron alguna vez algún duro golpe de este tipo? ¿ Quien fue el verdugo? Quizas sea un poco idealista pensar que todos tengamos que tener esta actitud, y si que lo es, no todos tenemos el tacto suficiente para lograrlo, y habrá que estar en guardia contra los que nos quieran destruir con el poder de la palabra venenosa, sabemos que en la mayoría de los casos es por falta de delicadeza, por eso mismo evitemos el rencor, seamos tolerantes con los que no saben tratar con la gente, y aprendamos a hacerlo cada vez mejor.

1 comment:

Lazarillo Mochilero said...

Buaaaaa, a mi me decian que era inûtil (de chico), sin embargo un día, hace años hice un ¨re ckicK´ y abundo en un exceso de confianza que la puedo irradiar al resto.

Ese cambio de sentirme que no podía nada, a poder conseguir con perserverancia lo que me proponga, me costó mucho, pero justamente lo bueno es haber hecho el click y ver mis propias capacidades (que todos las tenemos che !!)