Monday, June 25, 2007

El pintor de los guirasoles

"Por encima de todo, yo quiero llegar a un punto en que se diga de mi obra: este hombre siente profundamente y este hombre siente delicadamente . A pesar de mi reconocida torpeza(...) o quizás gracia a ella."

Vincent Van Gogh


En la historia de las expresiones artísticas, hablando en términos antagónicos, se podría decir, y no es una afirmación, que hubieron genios profanos y genios divinos: los primeros fueron niños prodigio; los segundos autodidactas que despertaron a su talento tardíamente. Si pensamos en que los dos llegaron al mismo resultado, una obra para la posteridad, vemos que al fin de cuentas no hay tantas diferencias entre ellos; y que resulta tranquilizador saber que no todos fueron divinos; sería demasiada presión para los artistas en ciernes, se sentirían inhibidos al saber que el niño Mozart tocaba en las cortes europeas a los 6 años. No hay una edad para ser escritor, músico o artista plástico, lo más importante es la pasión que uno ponga en su quehacer creativo, no hay leyes que digan que a los 40 años no se puede empezar, uno elige cuando. Yo admiro a Saramago porque es un gran luchador, él publicó su primera novela:” terra de pecado” en 1947 sin éxito, luego escribió su segunda novela que ni siquiera fue publicada, luego de eso por 20 años dejo de escribir, él dijo: “Sencillamente no tenía nada que decir y cuando no se tiene nada para decir lo mejor es callar.” Quizá esa frase sean un tanto extremista para mi gusto; pero no puede dejar de maravillarme el hecho de que al recomenzar su labor literaria a los 45 años, no paro esta convertirse en premio novel de literatura y hombre sabio.


Puede ser que resulte más impresionante leer en alguna biografía de Borges, que de niño se pasaba tardes enteras leyendo la enciclopedia Británica; pero también la historia de un pintor como Van Gogh es fascinante, por eso me voy explayar un poco sobre él: Lo que más me sorprende de su historia es que en tan solo 10 años hizo su aprendizaje de la pintura y su obra. Luego de haber fracasado en varias empresas juveniles; a los 27 años comienza dedicarse a la pintura con fervor, momento en el que vida y obra se hicieron indisolubles. Se alimentaba mal, su hermano lo ayudaba económicamente, era incomprendido en su tiempo, pero nada lo frenó, estaba convencido de lo que hacía. Y pensar que hoy en día sus cuadros valen millones, ¿será el precio que hay que pagar para quedar en la historia? ¿No se puede ser comprendido en el tiempo en que se vive? En 1888 tuvo su primera crisis mental y se automutiló la oreja; al año siguiente luego de varios ingresos y salidas del hospital principal de Arles, se interna voluntariamente en el malcomió Saint- Paul-de-Mausole, en Rémy- de Provence, donde permaneció hasta el 16 de mayo de 1890. Luego, era un hombre bastante nómade, se fue a Auvers-sur-Oise, donde vivía el doctor Gachet, por recomendación de un amigo. Una nueva depresión el 27 de julio de 1890 lo llevó a pegarse un tiro en el estomago mientras paseaba por el campo, convaleciente vuelve caminando al albergue donde vivía, pero a los dos días muere. Al finan todo el fuego que ardía en él se lo terminó devorando, sentía tanto la vida que no pudo soportar tanta cruel hermosura.


Personalmente me resulta más conmovedor lo profano; lo divino parece casi irreal. Sin llegar a extremos trágicos, creo que para construir una obra tenemos que dejar parte de nuestra vida en ese quehacer, sentir que eso es tan importante como comer, amar, sentir, acariciar, sentir que lo que estamos construyendo es como un órgano vital para nuestra existencia.





6 comments:

Fer said...

Hola, primera vez en tu blog...
me gustó mucho la idea de este post, sobre todo el final "sentir que lo que estamos construyendo es como un órgano vital para nuestra existencia". Estoy convencida de que parte de nuestra felicidad está en hacer algo que sea realmente vital, solo así tendrá real sentido para uno...
un beso

Anonymous said...

Desde ya muy agradecido por tu visita, todo nueva mirada siempre es bien recibida.

Sí, me gustaría irme de este mundo habiendo dejado algo: un libro; un hijos; una canción, algo que hable de mí aunque yo no esté.

Saludos

Luz said...

buenas...permiso...
Pasaste por mi blog y ahora te visito.
Te cuento que fue muy de mi agrado encontrarme con el señor Vincent por aquí, ya que es mi pintor favorito...:)
¿Te gusta "La Noche estrellada"?
Estoy totalmente enamorada de esa pintura desde que la descubrí por primera vez hace unos 10 años...
UN beso grande!

Anonymous said...

Sí, me encanta, es una de las repruducciones que trajo mi viejo de un viaje a New York en los 80. Ahora está en la casa de mi padre, así cada tanto la veo.

Un beso

Luz said...

Santiago: me gusta tu blog: ¿puedo agregarte a mis links para que te conozcan mis "visitantes"
Beso!
Luz

Anonymous said...

Cómo no, va a ser un placer que tus vistantes puedan conocerme,

Saludos