Por mi necesidad de expresarme y la pasión que pongo en mostrar mi mundo interior, como algo muy preciado, es que me siento identificado con el “romanticismo.” Durante este período surge el poema sinfónico, cuyo precursor fue Franz Liszt, una especie musical que se basa en una obra literaria o poética, donde aparte de lo sonoro hay algo que se quiere decir, convergencia que junta mi gusto por los letras y la música clásica. Para los temperamentos románticos, la quinta sinfonía de Beethoven, puede llegar a ser el equivalente a las turbulencias emocionales que sufrimos en nuestra lucha por ser auténticos y no engañarnos a nosotros mismos. Tampoco me gustan las ciertas normas, cuando tuve mis intentos de escribir poemas tratando de respetar una métrica, me di cuenta que eso me frenaba mucho, me quitaba espontaneidad, para crear necesito cierta libertad.
¿En ese culto el “yo” propio de los blogs, no estaremos viviendo una vuelta al espíritu romántico? Donde la subjetividad de cada uno se convierte en una obra de arte virtual, hecha de pensamientos y sentimientos, con el fin de mostrar que existimos y que somos únicos.
LINK: Artículo interesante sobre el tema
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3 comments:
Desde "La Naranja mecánica" beethoven adquirió otra connotación....o al menos algunas de sus sinfonías.
Lo de los blogs es cierto aunque en mi caso no es completamen íntimo, s
i, subjetivo.
Saludos! :)
Es interesante lo que planteás. Y creo que sí, que en el espíritu de los blogs habitan reflejos del romanticismo, aunque muchos no nos demos cuenta de ello en el mismo transitar.
En relación a las poesías o creaciones, a mí también me frena bastante adaptarme a determinada métrica o rima. En algún momento creí tener talento para ello, pero después la paciencia se fue haciendo añicos y entonces pocas veces puedo hacer una poesía como realmente quisiera.
Un abrazo grande.
Hay que tener mucho talento para escribir buena poesía, no?
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