La 12

Hace 8 años atrás era de ir a la cancha a alentar a boca, luego me dí cuenta que ir a un estadio ponía en peligro mi vida y no me dejaba nada. Lo único que rescato de ese tiempo, son los recibimentos de la hinchada, es un placer estetico para mí ahora. En ese entonces me ponía euforico cuando salía el equipo a la cancha , era como un ritual, ahora lo veo como algo que entretiene la vista nada más. Es un espectaculo impresionante ver los papelitos, la banderas, el humo de colores, la gente cantando, emociona. Hoy por hoy a mí ya no me emociona tanto , la violencia lo arruino todo, sé que hay gente que necesita ir a la cancha para descargar las tensiones de la semana, y está bien , yo prefiero descargarla de maneras más creativas y productivas.